Descubre Nuestras Morcillas Ibéricas2023-07-24T16:09:16+00:00
ARTÍCULOS

NUESTRA NUEVA MORCILLA IBÉRICA AL ESTILO ASTURIANO

NUESTRA NUEVA MORCILLA IBÉRICA AL ESTILO ASTURIANO

En España, donde el cerdo ocupa un lugar tan importante en nuestra gastronomía, podemos encontrar varios tipos de morcilla. Podríamos nombrar más de diez recetas tradicionales para este sabroso embutido que incluso tiene otras versiones en todo el mundo, desde Argentina hasta Puerto Rico e incluso en Estados Unidos.

La Morcilla Ibérica que producimos hoy en día en Fermín es característica de la zona de Extremadura y su ingrediente principal es la calabaza. Es una receta poco conocida cuyo origen se remonta al siglo XVIII, cuando debido a la escasez de alimentos, la carne fue reemplazada por calabaza.

Como es habitual en Fermín, esta primavera hemos añadido un nuevo producto a nuestra amplia gama: una Morcilla Ibérica al estilo asturiano.

La morcilla ibérica al estilo asturiano, como su nombre indica, se elabora en Asturias y es conocida en la cocina española debido al sabor característico que añade a todos los guisos del norte de España.

Nuestra Morcilla actual es muy dulce gracias a la calabaza y la cebolla. La nueva versión al estilo asturiano, incluso sin calabaza, también tiene un sabor ligeramente dulce debido a su alto contenido de cebolla. Se consideran sabores mucho más suaves que, por ejemplo, la famosa Morcilla de Burgos con arroz.

Ambas de nuestras Morcillas están hechas con grasa de cerdo ibérico finamente picada, lo que les da una textura delicada, casi como la de la mantequilla. Es por eso que recomendamos manipularla en la cocina como una pasta, al igual que hacemos con la sobrasada. Si deseamos cocinarla entera, es fácil que se rompa debido a su consistencia, lo que requeriría el uso de grapas o cuerdas en los extremos, algo que no está permitido cuando se lleva este maravilloso producto fuera de España.

Puedes utilizarla en recetas para el desayuno, el almuerzo, tapas, cenas y, por supuesto, agregarla a guisos, combinarla con mariscos e incluso untarla en pan y comerla «cruda», ya que es un producto curado. No recomendamos freírla, ya que este tipo de Morcilla no soporta mucho calor. Solo necesita unos segundos a baja temperatura para disfrutarla o cocinar con ella.

Aquí tienes algunas ideas para abrir el apetito y estimular tu creatividad.

RECETAS:

RECETAS:

Go to Top